Más de 30 jóvenes atendidos por Cáritas Diocesana de Barcelona cuentan con una persona voluntaria que les guía en el ámbito formativo, laboral y personal
Este 2023 será el tercer año consecutivo que se desarrolla la mentoría, una idea surgida de la necesidad de acompañar, guiar y apoyar a los jóvenes que lo necesitan en una etapa regida, precisamente, por los cambios. Esta dinámica del proyecto de acompañamiento de jóvenes Llankay de Cáritas se da entre tándems de dos, un mentor y un joven. El mentor es quien echa una mano a los jóvenes, para ampliar sus habilidades personales y laborales o, al menos, apoyarles en todo aquello que esté en sus manos.
Los participantes insisten en que esta dinámica no es solo unidireccional, sino que existe un aprendizaje mutuo. Esto se debe a que los integrantes de los tándems comparten intereses. “Desde Cáritas se hace un trabajo exhaustivo a la hora de buscar tándems de calidad. En la mayoría de los casos, la relación que se genera entre el joven y la persona que realiza la mentoría continúa una vez finalizado el proceso”, explica uno de los voluntarios.
Actualmente, hay 31 jóvenes que participan activamente en la iniciativa, y que están acompañados por 14 personas voluntarias. “La idea de la mentoría social es que los voluntarios se conviertan en un referente para los jóvenes, que se sientan sustentados y apoyados emocionalmente durante una etapa que puede resultar especialmente convulsa si no se tienen los recursos necesarios”, indican los técnicos del proyecto.
“La mentoría contribuye a ver las cosas con mayor claridad. Ayuda a ponerte objetivos”, señala uno de los jóvenes participantes. La meta es, precisamente, la de ir haciendo camino. Cumplir propósitos que motiven en el ámbito laboral, pero también en el personal, y que se acabe creando una relación y comunicación sincera entre la persona joven y su mentor.
A propósito de ello, los tutores reciben formación en mentoría antes de iniciar la participación en el programa, a fin de acompañar a los jóvenes adecuadamente, con herramientas e información sobre recursos externos que les puedan ser de utilidad. “Para nosotros, la mentoría es una herramienta de intervención muy potente, y que permite a los participantes experimentar un empoderamiento, una mejora de su autonomía, de las habilidades personales y de las competencias. Todo esto facilita el crecimiento personal y, en clave laboral, mejora la empleabilidad”, asegura Manel Calvo, referente laboral Llankay.