Ahora que el frío ha llegado para quedarse unos cuantos meses, es muy importante tener en cuenta una serie de acciones que te permitirán ahorrar energía -y también dinero- de forma fácil y barata
Te proponemos algunos consejos para reducir la factura de la luz, el gas o el agua:
- Cambiar las bombillas a LED
¿Aún tienes bombillas incandescentes (que pueden consumir entre 40W y 100W), o incluso alguna bombilla halógena de más de 50W? Hoy en día mantener este nivel de consumo no tiene ningún sentido, ya que la tecnología ha evolucionado mucho. Primero surgió la iluminación de bajo consumo y luego las luces LED, que además de consumir mucha menos energía, también son más sostenibles y ecológicas.
Las luces LED son un poco más caras que las convencionales (a partir de 3 euros), pero a medio y largo plazo el ahorro que suponen hacen que la inversión inicial salga a cuenta. - Temporizador de consumo eléctrico
La manera más sencilla de ahorrar electricidad es utilizar un temporizador para el encendido automático de radiadores, calderas, redes wifi,… Estos aparatos se pueden comprar, a partir de 5 euros, en cualquier ferretería o gran superficie.
Regulan minuto a minuto el encendido y apagado de los aparatos eléctricos que están conectados. Esto permite decidir cuándo se encienden y cuándo se apagan para ahorrar energía. - Ventanas de doble cristal
¡Por las puertas y las ventanas se escapa mucho aire caliente! Y esto hace que necesitemos más calefacción y energía para mantener una temperatura agradable dentro del hogar. Por ello uno de los mejores consejos es poner doble cristal en las ventanas, que te permitirá un aislamiento térmico y acústico y ahorrar mucha energía.
Si cambiar los cristales es demasiado caro, existen unas láminas especiales transparentes (a partir de 10 euros) que se pegan a las ventanas y mejoran su aislamiento térmico. - Evitar los agujeros bajo las puertas
La mayoría de puertas no ajustan perfectamente por debajo. Es decir, siempre queda algún centímetro de espacio entre la puerta y el suelo. Por estas rendijas, aunque parezca mentira, se escapa mucho aire caliente y entra frío en invierno.
Para evitar esto, en las ferreterías o almacenes de bricolaje venden una especie de espuma aislante en forma de tubos alargados (a partir de 6 euros) que están hechos especialmente para ponerlos bajo las puertas. Son muy fáciles de colocar. - Ahorrar agua
Si colocas un sencillo filtro reductor de caudal de agua (a partir de 7 euros), tanto en la ducha como en todos los grifos de toda la casa podrás reducir hasta un 40% el consumo de agua (según datos del Ayuntamiento de Barcelona).
Y para el inodoro, conseguirás un gran ahorro de agua si pones en la cisterna un objeto que ocupe volumen, como por ejemplo una botella de agua con arena.
Todos estos consejos, que aplicamos en los pisos de Cáritas, te permitirán ahorrar energía. Sin embargo, queremos que estas mejoras lleguen a todas las personas que atendemos para que puedan ver reducidos sus gastos en suministros. Si la sostenibilidad energética es un tema sensible para ti y quieres aportar tu grano de arena, ¡haz un donativo!