Más de 250 personas participan en la flashmob de Cáritas y la XAPSLL para denunciar la situación de las personas que sufren sinhogarismo
Bajo el lema “Podrías ser tú”, esta mañana más de 250 personas han sido convocadas por Cáritas Diocesana de Barcelona y la Red de Atención a Personas Sin Hogar (XAPSLL). La finalidad de esta acción ha sido hacer visibles a los que son invisibles: las personas sin hogar.
Con un globo blanco en la mano y una chapa con el lema de la campaña, todos los asistentes han pedido hacer visible un colectivo formado por más de 3.000 personas. El blanco impregnaba el centro de la Plaza Sant Jaume y los voluntarios no paraban de inflar globos para todos. Múltiples pancartas pedían “Nadie sin hogar” y eran el objetivo de los numerosos periodistas que han cubierto el acto.
Antes de tirar los globos al aire, la concejala Laia Ortiz, miembro de la XAPSLL, ha querido recordar que visibilizar el sinhogarismo no puede ser una campaña de sólo una semana sino que hay que luchar para que durante todo el año se hagan actos públicos que soliciten la dignidad, la justicia y la garantía de los derechos humanos de este colectivo.
Ninguna persona sin hogar
La lectura del manifiesto por personas que han pasado por el sinhogarismo ha sido el momento central y más emotivo de la flashmob. Con el manifiesto se pide dignidad pero también un compromiso conjunto de las administraciones para desarrollar políticas públicas que pongan a las personas en el centro y que apuesten por la protección y garantía de acceso a los derechos humanos. También se ha instado, siguiendo con la línea de la campaña “Podrías ser tú”, a crear mensajes positivos que luchen contra la discriminación y estigma que sufren las personas en situación de sin hogar.
Finalmente, todos los participantes se han unido para lanzar al unísono un globo a favor del sinhogarismo.
Cáritas y el sinhogarismo
Desde Cáritas Diocesana de Barcelona acompañamos a personas que no tienen un hogar donde poder dormir y vivir en condiciones dignas. Para ello contamos con 110 plazas de recursos residenciales donde acogemos a las personas que, desgraciadamente, no pueden disfrutar de un hogar propio.