Del 22 de junio al 22 de julio el Centro Abierto Glamparetes organiza un casal de verano para todos los niños que van durante el curso
Natalia y Marc son una educadora y un integrador social que se encargan del grupo de los más pequeños del centro abierto Glamparetes. El centro cambia ligeramente sus actividades en el verano: ofrecen un casal de verano pero sin cambiar su esencia de acompañamiento a los niños y a las familias.
Los niños llegan a las 10h, suben cada uno a la sala que les toca y esperan a que lleguen los demás. Cuando ya están todos es la hora de desayunar Después de un buen bocadillo cada niño realiza una tarea, como en casa: recoger la mesa, poner los platos en el lavavajillas, limpiar el suelo… Cuando todo está limpio dan comienzo las actividades, pero no sin antes lavarse los dientes, hábito diario muy importante.
Divertirse aprendiendo
Hoy se quedan en el centro para realizar algunos talleres. Se ponen las batas y se preparan para ensuciarse las manos y los pies de pintura. Las manualidades son una de las actividades que más les gusta a los niños de Glamparetes. Eso y también ir a la playa. Cada viernes cruzan las dos calles que les separan de la playa de la Barceloneta y se pasan el día en el agua y jugando. Otros días van al parque de la Ciutadella, a la piscina de La Floresta, ven una película o cocinan entre muchas otras cosas. Tienen muy poco tiempo para aburrirse.
A parte de las actividades fijas también hacen salidas más largas, ya sean culturales o de ocio: al Tibidabo o a Illa Fantasia. Son los mismos niños, los que dan ideas y escogen, mediante asambleas, las actividades que quieren hacer y los sitios a los que quieren ir. A partir de ahí y ciñéndose al presupuesto, se organizan las actividades.
Inteligencia emocional
Una pareja educativa, formada por un/a educador/a y un/a integrador/a social en cada grupo, se ocupan de los niños, les preparan las actividades que hacen al mismo tiempo que trabajan sus emociones, los hábitos y la construcción del yo.
Dos días a la semana los niños se quedan en el centro para garantizar que tengan, al menos, una comida digna al día. Los otros tres días marchan a las 14h. Natalia, la educadora social que trabaja con los más pequeños de Glamparetes explica: “Hacemos actividades para reforzar los hábitos diarios, para que, de esta manera, cuando tengan una dificultad, puedan superarla con las herramientas que les hemos ofrecido”.
Aunque las actividades diarias les encantan, el momento que todos los niños del Centro Abierto Glamparetes están esperando son las colonias de finales de julio: tres días fuera del centro llenos de yincanas, manualidades, piscina y bailes. Los dos primeros días los niños conviven con integradores y los educadores, pero el tercer día suben las familias para realizar una actividad conjunta: bañarse en la piscina y comer todos juntos.
El reloj marca ya las 14h, los niños van marchando uno a uno a casa, contentos y explicándoles a sus padres lo bien que lo han pasado hoy. Sonríen a Marc y a Natalia, que mañana a las 10h les esperarán en la puerta para hacer el verano más soportable.